En el capítulo 2 de Marcos Jesús sana a un paralítico, continua llamando a los que serán sus discípulos (Mateo) y enseña respecto de costumbres de los judíos y sobre el día de reposo.
Marcos 2.1- 12, 13-17, 18-22, 23-28.
Sanidad de un paralítico. El versículo 5-10 dice que “Jesús viendo la fe de ellos (los que traían cargado al paralítico y abrieron el agujero en el techo) le dijo al paralítico tus pecados son perdonados”. Los religiosos argumentaron “solo Dios puede perdonar pecados” y Jesús les dijo “para que sepan que tengo autoridad en la tierra para perdonar pecados” le dijo al paralítico “levántate, toma tu camilla y vete a tu casa.” ¿Cómo Jesús pudo ver la fe de los amigos del paralítico.
¿Qué les quiso decir Jesús con tengo autoridad para perdonar pecados? ¿Qué nos revela esta declaración sobre quien es Jesús?
Ante la crítica de los religiosos de que Jesús comía con cobradores de impuestos y pecadores Él les dijo “No son los sanos los que necesitan médico sino los enfermos. Y yo no he venido a llamar a justos sino a pecadores” ¿Qué quiso decir Jesús con estas palabras? ¿Qué nos dice a nosotros hoy en nuestro llamado como seguidores de Jesús?
¿Qué quiso decir Jesús cuando dijo “Nadie echa vino nuevo en odres (cueros para vino) viejos. De hacerlo así, el vino hará reventar los odres y se arruinarán tanto el vino como los odres. Más bien, el vino nuevo se echa en odres nuevos”. ¿Qué nos enseña esto a nosotros hoy? ¿Qué es el vino nuevo que Dios quiere darnos? ¿Cómo se puede ser odres nuevos?