Dice Proverbios 27.17 “Para afilar el hierro la lima, pero para hacer mejores personas el amigo.” 1a Corintios 15.33 nos dice “no erréis las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres”. Normalmente nosotros gastamos una buena dosis de nuestro tiempo con las amistades y si nosotros nos rodeamos de personas que no son nuestra mejor influencia de alguna manera las malas conversaciones nos van a ir corrompiendo o sea que sí que tiene que ver mucho con quien nosotros nos estamos relacionando.
Cuando hablamos de liderazgo y cuando hablamos de negocios se le dice a la persona que se rodee de personas iguales o mejores que él, mejores empresarios, con una mayor visión, personas que lo que te puedan decir sean cosas sólidas que fortalezcan tu integridad como persona, tus valores, que te inspiren a ser valiente en la toma de decisiones; o sea, necesitamos estar rodeados de personas que no solo nos hagan pasar bien el rato y la pasamos bien pero realmente al final del día pues, tú te quedas con espuma nada más, o sea nada sólido, nada firme, no te inspiró para que tu pacto matrimonial fuera más comprometido, no te inspiró a tomar mejores decisiones o sea, muy superficial.
Entonces, es muy importante que nos demos cuenta que la amistad ejerce una influencia poderosa en nuestras vidas. La amistad, aparte de brindarte una buena influencia si escogemos buenos amigos, te permite estar en un ambiente de cuidado: un amigo te cuida y te protege si realmente es tu amigo. Si realmente es tu amigo te va a decir no lo que tú quieres oír sino te va a decir la verdad y te va a estorbar. Si él te aprecia, aprecia a tu esposa, aprecia a tus hijos, te valora como persona cuando él vea que tú estás dando pasos en falso, cuando él vea que tus pasos se están yendo hacia la izquierda o hacia la derecha y que estás perdiendo el rumbo, un verdadero amigo te va a cuidar, te va a proteger, va a interceder sin que tu mujer se lo haya pedido y sin que tus hijos se lo hayan pedido. Va a interceder por tu esposa y va a interceder por tus hijos y te va a hablar en nombre de tu esposa y en nombre de tus hijos y te va a decir no pierdas la cabeza amigo, te has mantenido estos años, sigue en ello. Mira lo que dice la Biblia en Eclesiastés 4.9-10 “Mejores son dos que uno porque tienen mejor paga de su trabajo porque sí cayeren el uno levantará a su compañero; pero hay del solo, que cuando cayere no habrá segundo que lo levante”. Proverbios 17.17 dice “En todo tiempo ama el amigo y es como un hermano en tiempo de angustia”. Siempre habrán tiempos de angustia, tiempos duros en los que necesitamos de un amigo.
Finalmente, dice la Biblia que “el que quiera tener amigos ha de mostrarse amigo”. Si tú te muestras amigo vas a tener amigos, eso es así indudable. (Edgar Monterroso)